El movimiento cooperativo sigue con fuerza en el sector del pistacho de Castilla-La Mancha con la incorporación de nuevas agrupaciones como las constituidas en Madridejos, Quero y Corral de Almaguer, en Toledo, y un nuevo proyecto a punto de concretarse en Pedro Muñoz, Ciudad Real. En total, suman 330 socios y 2.020 hectáreas.
De todos ellos, el más avanzado es el de la Cooperativa de Pistacho y Almendras de Madridejos (Copisalma) que hace quince días comenzó las obras de su planta de procesado, con la construcción de una nueva nave en una parcela de 45.000 m2.
El proyecto de Copisalma, con 130 socios y unas 600 hectáreas, prevé una inversión aproximada de 2 millones de euros y su intención es procesar ya este año entre 80 y 100 toneladas, aunque las instalaciones tendrán una capacidad teórica para 800 toneladas.
La maquinaria se ha contratado con el fabricante español Agroisa e, inicialmente, contarán con pelado, separación de abiertos y cerrados y, por último, el secado -en este orden-, según la información facilitada por la junta directiva. La cooperativa también procesará almendra de sus socios en líneas separadas, aunque podrán compartir infraestructuras comunes como oficinas y báscula.
Para la comercialización del pistacho han iniciado distintas conversaciones con otros proyectos, aunque su objetivo es que pertenezca también al movimiento cooperativo siempre que puedan alcanzar los requisitos de calidad que les exigen.
Pistaquero. La cooperativa de Quero, que al igual que Copisalma se constituyó formalmente en noviembre, ya cuenta con los terrenos que incluyen una nave edificada. Suman por el momento 48 socios -están abiertos a nuevas incorporaciones- y 250 hectáreas. Su objetivo es disponer en la campaña de 2024 con instalaciones de secado y pelado con capacidad para 140 toneladas.
Nature Pistachio. La cooperativa de Corral de Almaguer finalmente no contará con la línea de procesado para la campaña de este año y tendrán que esperar a 2024 al retrasarse los plazos iniciales. En la actualidad suman 117 socios con unas 1.000 hectáreas.
Pedro Muñoz. Los cuatro grupos cooperativos del municipio, especializados en el sector vitivinícola desde su fundación, están impulsando una nueva cooperativa con sección de olivar, cereal y pistacho. Este proyecto lleva asociada la puesta en marcha de una planta de procesado para dar servicio a cerca de 35 productores de pistacho locales que suman 170 hectáreas. No se descarta abrir la nueva cooperativa a socios pistacheros de municipios cercanos como Mota del Cuervo, Campo de Criptana, Socuéllamos, El Toboso o Arenales de San Gregorio.
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